Valentiner en Bernutz
La galerista Angelika Bernutz (Kaiserswerther Straße 257) presenta en su primera exposición una selección de impresionantes composiciones en color de Peter Valentiner. Armoniosamente coordinados, estos cuadros abstractos transforman las luminosas habitaciones en un mar de color.
Peter Valentiner, nacido en Dinamarca en 1941, recibió su formación artística en Francia y actualmente vive y trabaja en Berlín, Colonia y París. Las pinturas acrílicas sobre ortiga de la década de 1980, en su mayoría sin título y, por tanto, sin ningún apego mental para el espectador, muestran superficies abstractas de color en diversas formas que parecen flotar frente a un fondo de cuadro monocromo. Los elementos de color individuales se pintan unos sobre otros en capas con ayuda de plantillas y destacan de su entorno por sus fuertes contrastes; se crea un efecto de mosaico similar al de una alfombra. De este modo, el movimiento y la estática contrastan con encanto.
Las obras viven de la infinita variedad de tensiones visuales que se consiguen sólo con la forma y el color. Las formas chocan o se superponen y, por tanto, indican un vaivén visual; pero los propios colores también tienen un efecto espacial por su luminosidad; los claros empujan hacia delante, los oscuros tiran hacia las profundidades. La aplicación diferenciada de la pintura también crea un efecto excitante en el cuadro; a veces es bidimensional, sin una pincelada reconocible, creando un efecto prismático. Las combinaciones de colores cálidos y fríos producen otros efectos.
De este modo, se transmiten ideas y estados de ánimo sin sugerir objetos reales. Un cuadro de 1984, por ejemplo, nos hace pensar espontáneamente en el otoño, por un lado a través de su acorde de color cálido-frío, y por otro a través de las formas flotantes y "caídas" del primer plano. - Valentiner ve sus cuadros en la tradición de la pintura francesa, como los de Cezanne y Matisse (Hasta nuevo aviso; abierto de martes a viernes, de 15.00 a 18.00). ILSE TJARDES
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